jueves, 25 de diciembre de 2014

Levántate y vuelve a tu Padre

Un hombre tenía muchos bienes. Un día, el menor de sus 2 hijos pidió la herencia y decidió irse de la casa porque creía que viviría mejor fuera de ella, haciendo lo que él quería en su propio criterio; el padre lo dejó ir. Paso el tiempo y éste joven malgastó todo y vivió las consecuencias de sus malas decisiones. Presionado por sus problemas decidió regresar a la casa de su padre, cuando estuvo cerca pudo ver a lo lejos a su papá esperándolo con los brazos abiertos, él corrió y lo abrazó, lloró y le pidió perdón reconociendo sus faltas. El padre hizo una fiesta por su regreso y un gran banquete, y dijo "mi hijo estaba perdido pero ha vuelto".

Si un día te apartaste de Dios pensando que te iría mejor fuera de él y hoy sientes el peso de tus decisiones erradas. ¡Levántate y vuelve a tu Padre! Él te espera en casa y quiere amarte lejos de juzgarte. Él es tu pastor y vivirás mejor en su rebaño. Ezequiel 34:15-16 "Yo apacentaré mis ovejas y las llevaré a reposar, declara el Señor Dios. Buscaré la descarriada, vendaré la herida y fortaleceré la enferma".

Vuelve y con gozo di el Salmo 23:1-4 "El Señor es mi pastor y nada me faltará. En lugares de verdes pastos me hace descansar, junto a aguas de reposo me conduce. Él restaura mi alma. Me guía por senderos de justicia por amor de su nombre".

Que Dios te bendiga.